¡Qué importante es el sueño en nuestras vidas! Tiene un papel esencial en el metabolismo y la homeostasis de los seres humanos y, por ende, en nuestra salud general. Una mala calidad del sueño y una duración inadecuada se han asociado a un mayor riesgo de enfermedades crónicas, como la hipertensión, la diabetes, la depresión, así como a un incremento de la mortalidad.
Y el ejercicio o actividad física (AF) también influyen en la calidad del sueño. Diversos estudios han demostrado que la AF puede reducir las probabilidades de sueño largo y corto, mejorar la calidad del sueño, y reducir el riesgo de insomnio y otros trastornos del sueño.
¿Cuándo hay que realizar AF? ¿Por el día o por la noche? ¿Puede influir en la calidad de nuestro sueño?
La asociación entre la AF y el sueño parece depender de las características de la AF, como la intensidad y el horario. Algunos autores han argumentado que la AF realizada por la noche tiene un efecto perturbador del sueño, pero la evidencia todavía no es clara.
Algunos estudios experimentales han encontrado que la AF realizada sólo durante el día mejora los resultados del sueño, pero estos hallazgos están limitados por muestras pequeñas y el sesgo de autoselección. Una revisión reciente de estudios experimentales no encontró evidencia que la AF nocturna empeore el tiempo de sueño. Además, pocos estudios han evaluado los diferentes períodos del día y las intensidades de la AF por separado.
En un trabajo recientemente publicado, se analiza el efecto de la AF y los patrones de movimiento de 24 horas sobre el sueño, y para ello se emplea la acelerometría, que podría ser una alternativa para medir el efecto de la AF aguda y libre sobre la noche de sueño subsiguiente en muestras basadas en la población y proporcionar algunas pruebas con respecto a las preguntas sin respuesta, incluyendo la relación entre el sueño y la intensidad de la AF y el momento del día en que se realiza la AF.
Este trabajo tuvo como objetivo verificar el efecto de las diferentes intensidades de AF realizadas durante diferentes periodos del día en la siguiente noche de sueño en una cohorte de adultos jóvenes.
Este interesante trabajo concluye que el efecto de la AF sobre la salud del sueño está intrínsecamente relacionado con el periodo del día en el que se realiza. La magnitud del efecto es diferente según el sexo. Para mejorar la salud del sueño, es preferible que la AF se realice durante el día.
La actividad física ligera durante el día se asoció con mejores resultados de sueño. Cualquier actividad física nocturna se asoció con una disminución del tiempo total de sueño y de la ventana de tiempo de sueño. Para mejorar la salud del sueño, se recomienda la actividad física diurna.
Autor del comentario: Dr Fernando de la Guía (Cardiólogo). @Cardio_delaGuia
REFERENCIAWendt A, da Silva ICM, Gonçalves H, Menezes A, Barros F, Wehrmeister FC.
Short-term effect of physical activity on sleep health: A population-based study using accelerometry [published online ahead of print, 2020 May 15].
J Sport Health Sci. 2020;S2095-2546(20)30053-3. doi:10.1016/j.jshs.2020.04.007